miércoles, 19 de agosto de 2009

QUIERE SER UN BOMBERO DE VERDAD

POR EMPO

SAN PEDRO SULA
El deseo de ser un combatiente de las llamas y auxiliar a las personas en peligro ha convertido a al niño Jesús ángel Laínez Cruz de seis años en un pequeño militante del Cuerpo de Bomberos de esta ciudad.

Jesucito es un pequeño bombero que nunca ha estado en medio de las llamas, pero a su corta edad ya hace pininos en lo que quiere ser cuando sea grande.

Llegar al cuartel de bomberos municipal ubicado en Prado Alto es su pasión y mucho más aprender de las lecciones que le dan todos los amigos de su padre, Jesús Laínez, quien también fue bombero por muchos años.
El sueño de verse convertido en un auténtico apagafuego lo llevó a persuadir a su progenitor para que le comprara un uniforme de trabajo para comenzar a practicar.
"Ponerme el uniforme es fácil, tomo mi hacha, mi foco y me preparo para ayudar a la gente", dice el pequeño.
El niño contó que es el segundo trajecito que tiene porque el primero era uno de un material menos resistente.

SUS EJERCICIOS
El pequeño Ángel dio a nuestro Blog una muestra de la forma en que pone en práctica los conocimientos que sus amigos le transmiten cuando llega a la estacion bomberil.
Una vez que se metió en su uniforme pidió manipular una de las mangueras que son utilizadas para apagar conatos y hasta enormes incendios.
Por su estatura no le pusieron toda la presión de agua, pero sí sostuvo el pesado grifo de salida mostrando mucha seguridad en lo que hacía.

Su segunda prueba fue subir a la cisterna que transporta los miles de litros de agua, pero sus cortas piernas impidieron que subiera los peldaños por su propia cuenta.
Subió a la unidad auxiliado por uno de los bomberos y una vez arriba se reflejó en su rostro la emoción de ver que sus sueños parecían hacerse realidad.

Para cerrar su jornada de aprendizaje trató de utilizar el tubo de bajadas en casos de emergencia, pero los bomberos le permitieron que se deslizara desde la mitad, por temor a una caída.

DE GENERACIÓN
El padre de Jesús Ángel, entusiasmado, expresó que cada semana lleva a su hijo a la estación por petición del pequeño.
"Con él seríamos tres los miembros del Cuerpo de Bomberos en nuestra casa", dijo, mientras contaba que tiene otro hijo de 16 años que colabora como voluntario.
"Si mi pequeño quiere ser un bombero lo voy a apoyar para que se cumplan sus sueños", afirmó.
Entre las actividades que se realizan en esta temporada está la concienciación del peligro de los juegos pirotécnicos.

Tampoco pueden faltar las enseñanzas a los menores sobre primeros auxilios, evacuaciones en situaciones difíciles, incendios y temblores.

URGEN BOMBERITOS
El comandante del Cuerpo de Bomberos Danilo Flores aseveró que hoy en día hay muchos niños que quieren ser "bomberitos".
Flores manifestó que los infantes que deseen ser bomberos infantiles desde ya pueden anotarse en los diferentes cuarteles de la ciudad sin costo alguno.

"El principal requisito es que a los pequeños les guste la idea de ayudar a los demás", dijo.
El comandante enfatizó que la inscripción debe tener el visto bueno de los padres y una disciplina de fin de semana.
A los infantes al final del año se les entrega un certificado que los acredita como bomberos voluntarios de la institución, informó el jefe bomberil.

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